En la final más electrizante del domingo, los capitaneados por Roberto Ibarra dieron vuelta un partido impresionante en los últimos minutos y se tomaron revancha de una final perdida en la «E» con Villa Aguirre. Ambos provienen del mismo «Soñando» y manteniendo el mismo nivel superador desde su entrada a la Copa. Fueron ascendiendo a la par y en este torneo se metieron rápido en la «C» para ganar sus grupos de manera invicta y llegar luego a la final del torneo. Fue un auténtico partidazo repleto de gente en ambas parcialidades. Villa Aguirre lo ganaba 2-0 en el segundo tiempo pero faltando cinco minutos An-Vivo logró la heróica y se consagró como el mejor:

AN- VIVO F.C 4–2 VILLA AGUIRRE

An- Vivo en una definición épica se coronó campeón

Por Franco Mengascini

Tranquilamente se podían jugar los Juegos Olímpicos de Invierno en Los Silos, el frio calaba hondo en los huesos, un buen paliativo era ver la contienda de dos viejos conocidos, dos equipos que se conocen desde siempre, gemelos nacieron en el mismo Soñando y transitaron las mismas categorías a la par. “Enemigos” íntimos, este era su tercer duelo en su historial, An- Vivo nunca había podido hacerse de la victoria. En un final de película, el conjunto verde torció el destino, marcando cuatro goles en el cierre concretando así, la victoria de sus vidas.

Un An-Vivo de arranque vertiginoso, mucha explosión, con “Niyi” Ibarra de botines rimbombantes como una de las principales amenazas.

Pero Villa Aguirre rompería el cero, a los quince minutos,  Gastón Achigar enganchó para su derecha por banda izquierda y la cruzó al palo más lejano marcando un golazo impresionante (1-0).

A los veinte minutos, Marcelo Infesta poseyó tres jugadas de riesgo, también Julián Merlo se sumó a la lista de ocasiones malgastadas. An-Vivo se retiraba injustamente abajo al entretiempo.

El segundo tiempo planchadisimo en su inicio, pero vibrante luego de los diez minutos, a An Vivo se le lesionó un jugador clave y Villa Aguirre en una maravillosa jugada abultó el marcador. Adriel Monsalvo por izquierda le dijo “toma y hacelo” a Daniel Ordoqui que con un derechazo mortal no perdonó (2-0). A los quince, Mati Tapia con un zurdazo acertó justo al palo, cuando varios ya había gritado gol.

El conjunto verde estaba más An-Vivo que nunca y Diego Dehesa abría el camino de la esperanza a los veinte minutos marcando el descuento (2-1).

Al “Verde” le quedaba tiempo para saber si su sueño concluía en algo, atentaba sobre el arco rojo con ferocidad. Al minuto, un centro ideal derivó en el tastazo de Luciano López que conectó perfecto (2-2).

La sed no se saciaba con los penales, An- Vivo renunciaba a la lotería, pocos segundos después otro cabezazo letal generó la locura verdiblanca, incrédulos ellos, Villa Aguirre, el público, absolutamente todos cuando Luciano López anticipó un córner de ”Niyi” Ibarra  proveniente de la izquierda y de túnel al golero vio como el balón contactó con la red (3-2).

Además recibía la dichosa noticia del penal por acumulación por faltas a su favor, Martin Ruiz frio como un tempano, sin un gramo de nervios, casi que concluyó el anhelo (4-2).

A los veinticinco, Walter Bonachina en el recurso más empleado de la noche, el cabezazo, estrelló el travesaño luego de que el golero alcance a rozarla.

Así, se cerró el telón, y en un desenlace para que no se escape de la memoria de nadie, An- Vivo levantó la Copa de Oro de la Categoría “C”.

Figura: Luciano López (An- Vivo), sus dos cabezazos, uno tras otro, encaminaron a la gloria a su combinado. Para no lavarse la frente nunca más, ja.